Estoy encantada con los euros sobre todo cuando sales al extranjero dentro de la zona euro, que ya no sé si eso es salir al extranjero. Les voy a contar una de cal y otra de arena, o lo que es lo mismo, malas noticias y otras buenas relativas al euro.
La mala noticia, es que España, junto con Grecia, (esta vez Portugal nos adelanta) se consolida como el país de la zona euro en el que más han aumentado los precios desde la llegada del euro en enero del 2002. Ha aumentado el precio de todo, y sobre todo de la vivienda, los alimentos y los carburantes. Por poner un ejemplo, si el precio de los alimentos ha subido un 4% de media, en la zona euro, el promedio es de 1’9%.
Donde menos se ha notado ha sido en los bolsillos de los finlandeses y los alemanes, que ha subido también todo, pero bastante menos.
Eurostat nos dice que entre el 2002 y el 2005 la inflación en España ha crecido una media de 3,4%, lo que significa más de un punto por encima del conjunto de los 12 países de la zona euro. Si nos remontamos a cuando existía nuestra peseta, el promedio de inflación entre 1996 y 2001, los últimos seis años de nuestra antigua moneda, fue del 2,7%. Lo que significa que el recorrido de la cifra de inflación se ha disparado en España después de la entrada del euro. Así que cuando piensa tomando un café, o en el supermercado con las berenjenas... joer con el redondeo, redondeo de euro en euro y los céntimos para qué, como si no existieran... de decoración.
Este alza sostenible de la inflación, y vienen más malas noticias, hace que todo esté cada vez más caro lo que nos conduce a un menor poder adquisitivo y a que la competitividad internacional de los productos españoles, al estar por las nubes, no los compra casi nadie. Ya nos lo ha dicho el Financial Times, España ha ido perdiendo competitividad frente al resto de los países de la zona euro, precisamente por la elevada tasa de inflación y el aumento del déficit por cuenta corriente.
Las buenas noticias son que casi todos los europeos de a pie, según una informe de la Comisión Europea, piensan como usted: el 81% de los ciudadanos de los 12 países asocia el cambio de euro con la subida de precios, por lo que usted no está sólo en sus pensamientos, todos pensamos igual “joer con el redondeo”; además hoy el gobierno español ha dicho que tiene un plan urgente para frenar nuestra inflación, que nuestro PIB por fin ha despegado; y por ultimo, que siempre podremos irnos a Finlandia a vivir o hacer la compra a sus supermercados, total, si ya no es el extranjero.
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