El primer ministro británico ha anunciado que dejará la política para el próximo 27 de junio. Ha hecho un balance por sus diez años de Gobierno y destaca, con respecto a la guerra de Irak, que hizo lo que creyó que era lo correcto, “permanecer codo con codo con nuestro más antiguo aliado, y lo hice fuera de dudas”. Tiene el mérito de haber ayudado a traer la paz a Irlanda del Norte tras cuatro décadas de violencia y por ser el creador de la llamada Tercera Vía, The Tirad Way, con la que acercó el centro al partido laborista.
El favorito para sustituirle dentro de las filas laboristas y en la jefatura del Gobierno es su ministro de Hacienda, Gordon Brown, que tendrá que superar una votación a finales de junio para poder ser elegido.
El favorito para sustituirle dentro de las filas laboristas y en la jefatura del Gobierno es su ministro de Hacienda, Gordon Brown, que tendrá que superar una votación a finales de junio para poder ser elegido.
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